El "Making of " del Textrinvm

 

La idea de recrear un telar romano surge cuando tenemos constancia de que en el Centro de Interpretación de la Historia de Ubrique existen once pondera (pesas de telares) y dos fusayolas (pesas de los husos). En ellas vimos la oportunidad de recrear una importante actividad dentro de la vida cotidiana en una ciudad de la Hispania Romana, en particular en Ocvri, tal y como se hacía unos 2.000 años atrás.

Fue un reto que nos planteamos con mucha ilusión, volverle a dar vida a esas pesas de telar sería una forma de traer al presente ese pasado. Y es por ello que pensamos que sería una buena idea hacer unas réplicas de esos 11 pondera y de las 2 fusayolas.

Para ello necesitábamos sus medidas y sus pesos. Así que pedimos a la delegación de cultura del Ayuntamiento de Ubrique que nos facilitara dicha información y de esta manera fue como pudimos obtener esos detalles tan necesarios para llevar a cabo sus réplicas. Unas réplicas que dieran vida al telar que debíamos construir.

Agradecemos a la Delegación de Cultura del Ayuntamiento de Ubrique y a su arqueóloga por su colaboración.

Durante el proceso de documentación, aprendimos que los pondera solían pesar entre 350 gr y 500 gr. Y así era, las pesas de Ocvri, aún desgastadas después de 2.000 años, tenían ese peso.

En mayo de 2021 contactamos con un alafarero que había participado en el mercado que se organizó durante la celebración de la X Bajada Romana en 2019. Nos pusimos en contacto con Pedro Carmona, de Jerez. En cuanto le contamos nuestro proyecto le pareció una idea genial hacer réplicas de unos pondus para recrear un telar romano. Así pues, desde el primer momento se ilusionó tanto como nosotros.

Durante el proceso, nos mandaba fotografías y vídeos de cómo iba elaborando los pondera y las fusayolas. Era genial ver cómo esos trozos de barro iban tomando las formas, los colores y los 2.000 años de antigüedad de los pondera y fusayolas encontrados en Ocvri. 

El 11 de julio quedamos en Ocvri y nos hizo entrega de los pondera y las fusayolas, empaquetadas en una cesta muy apropiada y envueltas y protegidas por tela de saco. Eran 22 pondera, dos réplicas de cada una de las pesas originales y 4 fusayolas, réplicas de las encontradas en Ocvri y unas cuantas sin ser réplicas para practicar el hilado. Cada una distinta de la otra, en sus colores, formas y pesos.

Fue una gran sorpresa, y un momento muy emocionante, desenvolver cada pesa y descubrir el excelente trabajo realizado por Pedro Carmona.

Pedro Carmona mostrando su trabajo

En mayo también encontramos un carpintero que quisiera construir un telar romano. Y fue cuando Francisco Javier Rosado aceptó el difícil reto.

También tuvimos que hacer un gran trabajo de documentación para poder saber cómo funcionaba un telar de pesas. Leer libros, artículos y ver muchos vídeos sobre telares de pesas para ver las partes que lleva y deducir las medidas, ya que en ningún lugar venía un tutorial de “cómo construir un telar romano”. Así que entre nuestra información y la experiencia como carpintero de Francisco Javier, nuestro sueño se hizo realidad.

Él también nos fue mandando fotos del proceso de su trabajo. Aquí las exponemos.

Fue un trabajo en contacto continuo. Cada vez que había que dar un paso en su construcción quedábamos para ver cómo iba todo, pues debíamos estar seguros de que las medidas eran las adecuadas. 

Además del telar, también necesitábamos los utensilios usados para la actividad de hilar y tejer. Eran necesarios husos, ruecas, lanzaderas y una espátula. Y, Francisco Javier, muy involucrado en el proyecto, supo plasmar todo aquello que le íbamos indicando.

Dando un acabado envejecido

Como digo, fue todo un reto, pero no podemos estar más contentos con el resultado obtenido.

Resultado final de la elaboración del telar

Cómo quedó el telar a su finalización

Una vez que teníamos los pondera y el telar con todos sus utensilios, había que comenzar a hilar y tejer. En este caso, son muchos vídeos los que tuvimos que ir viendo. Vídeos encontrados en YouTube y que mostraban lo que necesitábamos saber, aunque a veces no era exactamente lo que andábamos buscando pero, nos servía como idea.

También es verdad que a la hora de hacer la urdimbre tuvimos serios problemas y es por ello que contactamos con la fábrica de mantas de lana de Grazalema.

Fue Mario el que, amablemente, nos recibió en Grazalema. Le llevamos el telar, ya que el nuestro es bastante rudimentario comparado con los de hoy en día, para que pudiera ver cómo iría la urdimbre en nuestro telar.

Para él también fue un reto poder comprender cómo iría la urdimbre acoplada a lo que se conoce como iugum, pero finalmente nos iluminó y la pudimos comenzar. Nos dijo que teníamos que ir colocando hilo a hilo todos los hilos de la urdimbre. En nuestro caso serían unos 220 hilos. Le estamos eternamente agradecidos por habernos ayudado a seguir adelante.

                            

        

     

                               

                                                                                                     

                                                                                             

                                                                                 

La urdimbre son los hilos que van de arriba a abajo y donde se cuelgan los pondera para que los hilos estén tensos. La urdimbre hay que hacerla con cuidado y los hilos deben ser fuertes porque soportan todo el peso. Es la columna vertebral en la elaboración del tejido, un fallo en la urdimbre y no se puede tejer.

Por último, también había que escribir un guión, una pequeña pieza teatral donde exponer toda la información referente al TEXTRINVM. Decidimos darle ese formato porque pensamos que es más ameno e ilustrativo mostrar una escena familiar dentro de una domus. Cada frase de los personajes da información sobre la actividad realizada en ese rincón de la casa dedicado a la elaboración del tejido: el textrinvm.

Para nosotros, que no somos actores, ni actrices, ha sido un reto pero, es gratificante ver como un proyecto tan ambicioso toma forma gracias a que, las personas involucradas en el proyecto, han participado activamente en él con ilusión y entusiasmo. Agradecemos su trabajo, tesón y sacrificio en estas calurosas semanas estivales y vacacionales a: Raquel Pineda, Eli Sánchez, M. Isabel Carrasco, Manuel J. Castro y Josefina Herrera y a los niños Nicolás, Darío y Daniela.

Aquí unas instantáneas durante los ensayos.

Os esperamos el día 27 de agosto a las 20:00 en el auditorio de centro de recepción del Yacimiento de Ocvri

Agradecimientos a:

• La Fundación de Cultura de la Diputación de Cádiz.
• La Delegación de Cultura del Ayuntamiento de Ubrique
• Luis Javier Guerrero Misa, arqueólogo e historiador. Miembro de ASPHA. Director de las intervenciones arqueológicas y puesta en valor del yacimiento de Ocuri entre los años 1998 y 2015.
• M. Isabel Campos, arqueóloga municipal del Yacimiento de Ocvri
• Josefa Gómez, licenciada en filología clásica
• Manuel J. Castro, como antropólogo
• Isabel Pajuelo, guía del yacimiento de Ocvri
• Antonio Mateos  por aguantarnos, casi a diario, en su bar en Ocvri durante la preparación del telar y en los ensayos.
• Pedro Carmona, artesano que elaboró las reproducciones de pondera y fusayolas halladas en Ocvri.
• Francisco Javier Rosado, carpintero que fabricó el telar